Pogen.- México ocupa el noveno lugar en la lista de los países que este año han instalado más aplicaciones móviles de e-commerce de todos los sectores y el quinto lugar de e-commerce del sector de la moda.

La lista, compilada por la compañía de análisis de datos AppsFlyer dentro del reporte “The State of Shopping App Marketing”, coloca a Brasil como el país con más instalaciones no orgánicas.

Después del país latinoamericano, se posicionan Estados Unidos, Indonesia, India, Vietnam, Filipinas, Tailandia, Rusia, México y Francia.

En el ranking de los países con más instalaciones no orgánicas de aplicaciones para el comercio electrónico enfocado al sector de la moda, India ocupa el primer puesto y México el quinto. 

Los consumidores en Brasil y México son compradores cada vez más activos

Según el reporte, entre abril y junio en México hubo un incremento en sesiones en apps del 90% y en Brasil un aumento del 50%.

Asimismo, en México se registró un incremento del 20% en los ingresos por usuario en las aplicaciones minoristas de todos los sectores.

Durante esos mismos meses, la inversión publicitaria también ascendió. En Brasil, solo para el sector de la moda el gasto aumentó un 150%; en todos los sectores, un 25%.

El crecimiento seguirá en temporada de eventos comerciales

A pesar de la incertidumbre económica, se prevé que en la próxima temporada navideña y de eventos comerciales se genere una actividad sin precedentes en las compras en línea de comercios electrónicos generales y especializados.

Esto requerirá que los especialistas en marketing estudien las múltiples áreas que tienen que optimizar para que los consumidores puedan encontrar, explorar y comprar rápida y fácilmente desde una aplicación.

Además, deberán poner especial atención a los mensajes dirigidos hacia los consumidores. La creatividad será un factor determinante para que a través de los mensajes se genere un sentido de empatía y reviva el espíritu de fiestas en tiempos complicados.

“The State of Shopping App Marketing” recomienda que se fomenten las donaciones sociales, es decir, ofrecer donar una parte de una venta a organizaciones no gubernamentales u otras causas, así como ofrecer productos que presenten mejoras a los hogares o ayuden a las personas a desarrollar nuevas habilidades.